Tabla de contenido
Diagnóstico
El médico comenzará con un examen físico y preguntas acerca de los síntomas de su bebé. Si su bebé está sano, creciendo como se esperaba y parece contento, entonces por lo general no se necesitan más pruebas.
Si se necesitan más pruebas, su médico podría recomendarle:
- Ultrasonido: Este examen imagenológico puede detectar estenosis pilórica.
- Pruebas de laboratorio: Los exámenes de sangre y orina pueden ayudar a identificar o descartar posibles causas de vómitos recurrentes y aumento de peso insuficiente.
- Monitoreo del pH esofágico: Para medir la acidez en el esófago de su bebé, el médico insertará un tubo delgado a través de la nariz o la boca del bebé y dentro del esófago. El tubo está conectado a un dispositivo que monitorea la acidez. Es posible que su bebé necesite permanecer en el hospital mientras se lo vigila.
- Rayos X: Estas imágenes pueden detectar anomalías en el tracto digestivo, como una obstrucción. A su bebé se le puede administrar un líquido de contraste (bario) de un biberón antes del examen.
- Endoscopia superior: Se pasa un tubo especial equipado con un lente de cámara y luz (endoscopio) a través de la boca del bebé hasta el esófago, el estómago y la primera parte del intestino delgado. Se pueden tomar muestras de tejido para su análisis. Para los bebés y los niños, la endoscopia generalmente se realiza bajo anestesia general.
Tratamiento
El reflujo infantil generalmente desaparece por sí solo. Mientras tanto, su médico podría recomendarle:
- Darle a su bebé alimentos más pequeños y frecuentes.
- Interrumpir la alimentación para hacer eructar a su bebé.
- Sostenga a su bebé erguido durante 20 a 30 minutos después de alimentarlo.
- Eliminar los productos lácteos, la carne de res o los huevos de su dieta si usted está amamantando, para examinar si su bebé tiene una alergia.
- Cambiar el tipo de fórmula que usted le da de comer a su bebé.
- Usar un tamaño diferente de tetina en los biberones. Un pezón demasiado grande o demasiado pequeño puede hacer que su bebé trague aire.
- Fórmula espesa o leche materna extraída ligeramente y en incrementos graduales con cereal de arroz. Aunque se reconoce como una estrategia razonable, el engrosamiento agrega calorías potencialmente innecesarias a la dieta de su bebé.
Medicamentos
Los medicamentos para el reflujo no se recomiendan para niños con reflujo sin complicaciones. Estos medicamentos pueden prevenir la absorción de calcio y hierro y aumentar el riesgo de ciertas infecciones intestinales y respiratorias.
Sin embargo, se podría recomendar un ensayo a corto plazo de un medicamento bloqueador del ácido, como la ranitidina para bebés de 1 mes a 1 año de edad o el omeprazol magnesio (Prilosec) para niños de 1 año de edad o mayores, si su bebé:
- Tiene poco aumento de peso y los tratamientos más conservadores no han funcionado.
- Se niega a alimentarse
- Tiene evidencia de esófago inflamado
- Tiene asma crónica y reflujo
Cirugía
En raras ocasiones, el esfínter esofágico inferior se tensa quirúrgicamente para evitar que el ácido regrese al esófago. Este procedimiento (fundoplicatura) generalmente se realiza sólo cuando el reflujo es lo suficientemente severo para prevenir el crecimiento o interferir con la respiración del bebé.
Estilo de vida y remedios caseros
Para minimizar el reflujo:
- Alimente a su bebé en posición vertical: También sostenga a su bebé en posición sentada durante 30 minutos después de alimentarlo, si es posible. La gravedad puede ayudar a que el contenido del estómago permanezca donde pertenece. Tenga cuidado de no empujar o sacudir a su bebé mientras la comida se está asentando.
- Pruebe con alimentos más pequeños y frecuentes: Alimente a su bebé un poco menos de lo normal si usted está amamantando con biberón, o reduzca un poco el tiempo de lactancia.
- Tómese su tiempo para hacer eructar a su bebé: Los eructos frecuentes durante y después de la alimentación pueden evitar que el aire se acumule en el estómago de su bebé.
- Ponga al bebé a dormir boca arriba: La mayoría de los bebés deben ser colocados boca arriba para dormir, incluso si tienen reflujo.
Recuerde, el reflujo infantil por lo general no es motivo de preocupación. Sólo tenga a mano un montón de trapos para eructos mientras los usa.
Cómo prepararse para su cita
Si el reflujo continúa después del primer cumpleaños de su hijo, o si su hijo tiene síntomas como falta de aumento de peso y problemas respiratorios, es posible que lo remitan a un médico que se especialice en enfermedades digestivas infantiles (gastroenterólogo pediátrico).
Lo que puedes hacer
- Anote los síntomas de su bebé, incluyendo la frecuencia con la que su bebé escupe y la cantidad de líquido que se escupe.
- Anote la información médica clave, incluyendo la frecuencia con la que alimenta a su bebé, cuánto tiempo dura la alimentación y la marca de cualquier fórmula que esté usando.
Escriba las preguntas que le va a hacer a su médico
Preguntas que debe hacerle a su médico
- ¿Cuál es la causa más probable de los síntomas de mi bebé?
- ¿Necesita mi bebé alguna prueba?
- ¿Qué tratamientos están disponibles?
- ¿Debo hacer algún cambio en cómo o qué le doy de comer a mi bebé?
Además de las preguntas que ha preparado para hacerle a su médico, no dude en hacer otras preguntas durante su cita.
Qué esperar de su médico
Es probable que su médico le haga varias preguntas, incluyendo:
- ¿Cuándo comenzaron los síntomas de su bebé?
- ¿Su bebé escupe con cada comida o sólo ocasionalmente?
- ¿Está su bebé contento entre comidas?
- ¿Ha pasado recientemente de la lactancia materna a la alimentación con biberón? ¿O ha cambiado de fórmula para bebés?
- ¿Con qué frecuencia alimenta a su bebé y cuánto come en cada comida?
- Si tiene diferentes cuidadores, ¿todos alimentan al bebé de la misma manera cada vez?
- ¿Hay algo que parece mejorar o empeorar los síntomas de su bebé?